Fútbol femenino: las estrellas del momento
La liga inició su primera temporada profesional en pleno auge popular pero con incógnitas sobre su viabilidad
El fútbol femenino está batiendo todo tipo de récords.
Muchas niñas, y cada vez más niños, están dejando a un lado a Benzemá, Pedri o Griezmann y prefieren estampar, en sus caras camisetas de clubes, los nombres de Aitana, Alexia, Esther o Torrecilla. Son las nuevas heroínas, más accesibles y más abiertas a los medios y al contacto con los aficionados, de un nuevo fútbol que ya no puede calificarse de moda pasajera.
La audiencia responde
Unas ídolos más terrenales, en definitiva, que comienzan la liga con el objetivo de aprovechar el tirón de las estupendas audiencias televisivas y asistencias a los campos que registró la Eurocopa de este verano en Inglaterra. Los partidos de España no bajaron de los 1,5 millones de espectadores en TVE, con una media de 2,5 en los cuartos de final ante la anfitriona.
Ahora, el reto es traspasar ese interés puntual por la selección al día a día de una competición doméstica que este año profesionaliza del todo sus estructuras.
Un Barça sin Alexia
Deportivamente, el panorama está más claro. El FC Barcelona domina con mano de hierro y es el campeón de las tres últimas ligas. En la pasada edición arrasó, literalmente, ganando los 30 partidos del campeonato. Las miradas ahora están puestas más que nunca en el Real Madrid, que en el tercer año de vida de su sección, tiene la tarea de plantear batalla y relanzar el creciente interés de la competición.
Alexia tiene por delante meses de recuperación.
De entre las nombres propios, la principal atracción es la gran ausente: Alexia Putellas ha conseguido tocar el cielo y, a la vez, el infierno este 2022. La FIFA le otorgó el Balón de Oro que la distingue como mejor futbolista del mundo y la UEFA la ha reconocido como mejor jugadora por segundo año seguido, pero una rotura del ligamento cruzado justo antes de la Eurocopa la ha dejado fuera de combate para 10 meses. Con suerte, reaparecerá en abril para ayudar al Barça en la recta final.
AITANA. La centrocampista del Barça es una digna heredera de Xavi Hernández.
Otro icono indiscutible es la central azulgrana Mapi León. La aragonesa desprende personalidad dentro y fuera del campo, donde se ha erigido en una referente para los más jóvenes a la hora de visibilizar a la comunidad LGTBI.
MAPI. La defensa azulgrana es una apasionada del dibujo y los "tatoos".
"No me siento un icono, solo busco ser sincera. Creo que he podido ayudar", explicó Mapi, que no tiene problema en explicitar en las redes su relación de pareja con Ingrid Engen, compañera de vestuario en el Barça.
En el bando merengue, Esther González es ahora su emblema ofensivo, aunque pasó seis temporadas en el Atlético, su eterno rival ciudadano. El Madrid se hizo con ella después de que el curso 2020-21 rozara el pichichi de la competición anotando 29 tantos.
Sofi e Svava, el fichaje más caro
SVAVA. La danesa se muestra muy enamorada de la ciudad de Madrid en sus redes sociales.
También viste de blanco el fichaje más caro de la historia de la Liga. Sofi e Svava es una estrella en la selección danesa y el pasado enero el Madrid pagó 800.000 euros de traspaso por la rubísima lateral zurda, procedente del Wolfsburgo. Sus coreografías en Tik Tok causaron furor en la pasada Eurocopa y dispararon su popularidad y su número de seguidores.
La mejor noticia del torneo, sin embargo, se llama Virginia Torrecilla, que batalló contra un tumor cerebral que se le diagnosticó en pleno confinamiento. "El deporte fue mi salvación, hasta que no pude más por la quimioterapia", confesó la mallorquina del Atlético de Madrid.
VIRGINIA TORRECILLA. Tras superar el cáncer, el Atlético la ha renovado hasta el 2023
Superada la enfermedad, volvió en la final de la Supercopa y fue manteada por sus compañeras y rivales, muchas de ellas amigas, al terminar el partido.
