Arantxa Sánchez Vicario evita la prisión
La Fiscalía ha rebajado su pena a dos años, pero mantiene la de cuatro para Santacana
La Fiscalía y el Banco de Luxemburgo acordaron rebajar la petición de prisión para Arantxa Sánchez Vicario de cuatro a dos años, por lo que al carecer de antecedentes, evitará la cárcel. En cambio, mantienen la pena de cuatro años para su marido, Josep Santacana, al que señalan como autor o cooperador necesario del delito. La pareja habría ocultado su patrimonio para evitar el pago de 7,5 millones al Banco de Luxemburgo.
Un intento de secuestro hace 20 años
También acaba de saberse que a finales del 2001 el padre de Arantxa, Emilio, recibió una llamada en la que se amenazaba con secuestrar a su hija si no entregaba 500 millones de las antiguas pesetas. No hizo ni dijo nada porque no quería preocupar a su familia, pero lo que le llevó a actuar fue un sobre, remitido desde Bogotá, que llegó a su domicilio en abril del 2002. En su interior había fotografías que mostraban un seguimiento exhaustivo a la tenista. Emilio lo explicó a la policía y las amenazas cesaron.