David Bustamante: "Yana es la mejor persona que he conocido en mi vida"

Siempre hemos sabido que David Bustamante es un culo inquieto que necesita retos en su vida para saciar sus ansias de crecer profesionalmente. Y después del parón que ha vivido debido a la pandemia no podía sino volver a lo grande: musical en teatro, serie de televisión y concurso. ¡El polifacético artista habla de todo ello con tu Revista Pronto! 

El cántabro ha debutado en el género musical con "Ghost", que acaba de arrancar en el teatro EDP Gran Vía (Madrid). Curiosamente este filme ha marcado la vida de David porque, según nos dijo, "es la película favorita de mis padres. Además, el vídeo de mi Primera Comunión tiene de música la banda sonora de esta cinta, y tuve un perro que se llamaba Ghost y una perrita que se llamaba Molly. ¡Así que yo tenía que ser Sam, no podía ser otro!". Su papel se lo alternará con Ricky Merino.

"Está hecho con mucho cariño y a muchos les va a sorprender"

"El teatro musical era una bombillita que se me iba encendiendo de vez en cuando. Tenía muchísimas ganas de hacerlo. Yo he crecido con cantantes como Camilo Sesto o Raphael, y los he visto hacer cosas tan grandes como “Jesucristo Superstar” o “Jekyll y Mr. Hyde”", nos explicó el cantante, que actuará en el musical tres veces por semana.

PRONTO: ¿Cuál es el reto más grande al que te has tenido que enfrentar para interpretar a Sam?

DAVID BUSTAMANTE: El reto ha sido tener que encontrar a mi Sam, y que sea un Sam sólido y creíble para poder apoyar y hacer grandes a mis compañeros. Tengo muchísimo respeto por el elenco, por gente que lleva en esto mucho tiempo, que son unos verdaderos monstruos. Al principio, cuando ensayaba con ellos, me quedaba boquiabierto viéndolos y cuando me tocaba a mí se me olvidaba actuar. Yo le tengo mucho respeto a esto y sé que habrá muchos detractores, pero está hecho con mucho cariño y a muchos les va a sorprender.

P.: ¿Te preocupa que se te mire con lupa por no ser actor?

D.B.: Es lógico. Llevo 20 años en esto y yo soy cantante, pero seré cantante los dos primeros minutos que me veáis ahí en escena. Lo que quiero lograr es que luego os olvidéis de Bustamante y veáis a Sam. Ése es mi verdadero reto. No quiero que se me vea como a un intruso, ya que soy un artista que ha cantado e interpreta sus canciones.

P.: ¿Hay nervios al reencontrarte con el público?

D.B.: Muchos, me siento un poco primerizo. Es una sensación extraña. Hasta que yo vuelva a poder bajar mis pulsaciones va a pasar un tiempo. Pero ésa es la magia. La adrenalina engancha. Piensa que en esta profesión nadie se quiere jubilar, y por algo será. Es muy bonito, soy un afortunado de hacer lo que me gusta.

P.: ¿Yana te ha ayudado en el baile, con las coreografías?

D.B.: Es que Sam no baila. Pero tengo que hacer trucos de magia y muchas cosas. Y hay algo que he conseguido sacar que va a hacer que a la gente se le ponga la piel de gallina.

"Estoy en un gran momento, lleno de proyectos"

P.: ¿Qué te dice Daniella de esta aventura?

D.B.: Ella me pide que le reserve ocho o nueve entradas para amigas. Y le digo: "¿Y luego querréis que os invite a cenar?", y me dice: "Hombre, claro, papá". La niña está muy contenta porque me ve contento. Está feliz porque ésta es la historia perfecta. Mi personaje es un caramelo y es mi vuelta a los escenarios después de la pandemia. Imaginad las ganas que tenía porque desde los 14 años que empecé a trabajar yo no he parado nunca en mi vida. Y volver al escenario después de todo esto que nos ha sacudido es brutal. Yo lloro por estar aquí, porque es volver a trabajar con un proyecto mágico.

David Bustamante está viviendo un momento muy especial

P.: Se te nota feliz. La vida te sonríe en todos los aspectos.

D.B.: Sin ninguna duda, estoy muy contento. La verdad es que estoy en un gran momento, con muchísimos proyectos también de futuro. Pronto grabaré mi disco, volveré a mis giras. Estoy feliz.

Recordemos que el ex de Paula Echevarría llegó a confesar que pasó dificultades económicas durante la pandemia. 

P.: Y estás en "MasterChef Celebrity".

D.B.: Sí, sí, ¡y ahora llego a casa después de estar 10 horas aquí y tengo que cocinar! Me dicen las dos, Yana y Daniella: "¡Es que lo haces tan rico!".

P.: ¿Has aprendido mucho?

D.B.: Muchísimo. Yo sabía hacer un arroz blanco y un arroz a la cubana, y no voy a hacer "spoilers", pero he hecho platos de tres estrellas Michelin. Y me he comprado aparatos, cocino a baja temperatura, hago esferificaciones, espumas, aires… Cuando viene gente a casa preparo postres muy elaborados y me divierte porque me gusta ser anfitrión, que la gente venga a casa.

P.: ¿Cómo ha contribuido Yana en tu vida a que te veamos así de bien y feliz?

D.B.: Dándome estabilidad y tranquilidad. Es la pareja perfecta, una gran persona, muy comprensiva, que me cuida y me mima mucho. Es mutuo y todo es muy fácil. Es la mejor persona que he conocido en mi vida. Es tan buena niña que hace todo fácil. Uno tiene ganas de volver a casa porque la recompensa es inmejorable. Teniendo esa tranquilidad, uno puede volcarse y dar absolutamente todo lo que tiene para brillar.

"No tengo prisa por tener más hijos"

P.: ¿Os planteáis Yana y tú casaros?

D.B.: Es que las cosas así están bien y Yana es muy joven y muy niña aún. No hay prisa, las cosas surgirán o no. De momento estamos muy felices y muy bien, muy tranquilos. Funciona todo, ¿para qué tocarlo? Las cosas buenas y naturales que surgen en el momento son las adecuadas. Y sería quemar etapas que no corresponden.

P.: ¿Y niños?

D.B.: Exactamente igual, no tengo prisa. Pero hay que practicar, ¡eso siempre!