María Teresa Campos: el álbum de fotos más familiar de la periodista
La veterana periodista siempre ha estado muy volcada con su familia
La infancia de María Teresa
La veterana periodista nació el 18 de junio de 1941 en Tetuán, Marruecos, y al cumplir un año de edad su familia se instaló en Málaga.
María Teresa era la tercera de seis hermanos, junto con los que creció en un ambiente conservador y acomodado, ya que su abuelo fue uno de los primeros comerciantes importantes de la ciudad de Lucena (Córdoba).
María Teresa Campos y su relación con sus hijas
Carmen Borrego y Terelu Campos siempre han estado muy unidas a su madre. Para María Teresa, ellas eran lo más importante en su vida.
Desde muy jóvenes, las hijas de la Campos quisieron seguir los pasos de su madre en televisión y se convirtieron en dos de las colaboradoras más queridas de Telecinco.
María Teresa, íntima amiga de Rocío Jurado y "segunda madre" de Rocío Carrasco
'La reina de las mañanas' y 'la más grande' se convirtieron en las mejores amigas cuando ambas estaban en la cima del éxito.
Tras la triste muerte de Rocío Jurado, María Teresa acogió a Rocío Carrasco como una hija más y se convirtieron en familia, incluso trabajaron juntas durante un tiempo.
María Teresa adoraba a sus nietos
La presentadora tenía tres nietos: dos hijos de Carmen Borrego y una de Terelu Campos. José María (el de la foto) y Carmen Rosa Almoguera Borrego, y la reconocida Alejandra Rubio. También tenía un bisnieto, Marc, el hijo de José María.
María Teresa siempre estuvo muy unida a Alejandra, su nieta más mediática. De hecho, la colaboradora escribió una tierna carta de despedida para su abuela: "Gracias por el legado que nos has dejado, por no haber parado de trabajar ni un segundo para darnos la mejor vida posible. Todo lo que hemos querido nos lo has dado a todos, siempre pendiente de cada detalle. Gracias por tu generosidad con tu familia y con los demás, he aprendido tanto de ti", dijo, entre muchos otros recuerdos de su "querida abu".
María Teresa quería muchísimo a sus nietos y es que, tal y como explicó Alejandra, no dudaba en tumbarse en el suelo para jugar con ellos: "Desde que era una enana te tirabas en el suelo de la buhardilla de casa para jugar juntas a las muñecas".
Sin duda, María Teresa formó una familia muy unida que la quería muchísimo.