La dieta antiinflamatoria y antiedad: especial 'Guerra a la celulitis'
La inflamación crónica empeora la celulitis. No es para menos, ya que este problema estético tiene una base inflamatoria
Mejorar la dieta es frenar el avance de la celulitis.
A nivel estético, podemos pensar que la inflamación crónica sólo se acusa en el vientre en forma de hinchazón abdominal, ¡pero no! La flacidez de la piel también es consecuencia de esa inflamación continuada y sigilosa. La buena noticia es que las dietas que evitan las montañas rusas de glucosa y ayudan a adelgazar producen en paralelo una mejora de la temida piel de naranja.
De nuevo, nos encontramos ante un círculo vicioso porque el exceso de grasa sobrante multiplica la inflamación crónica y ésta, a su vez, provoca un desequilibrio hormonal que favorece la aparición de celulitis o agrava la ya existente. No es de extrañar que en esas etapas en las que abusas de la comida basura, los ultraprocesados o los dulces, se hagan más evidentes los hoyuelos de la celulitis.
Menos tóxicos, menos inflamación
Seguir nuestra dieta ayuda a desinflamar los nódulos de grasa bajo la piel, activa la circulación, moviliza las toxinas retenidas y elimina líquidos. ¿Resultado? La celulitis de los glúteos, las caderas o las piernas retrocede y, como la piel gana firmeza, pasa más desapercibida.
Dicen que somos lo que comemos, así que si quieres declarar la guerra a la piel de naranja, cuida tu alimentación. Los meses de calor son la época ideal para preparar comidas más ligeras y hacer deporte al aire libre. ¡Aprovecha!
Recuerda que para llegar al objetivo, además de apostar por lo verde, los cereales integrales y las proteínas y grasas "buenas", nuestro sistema digestivo necesita descansar al menos cuatro horas entre comida y comida.
No picotear facilita las cosas, ya que estabiliza las tasas de azúcar, favorece la pérdida de peso y activa, según la Dra. Gabriella Pocoví, "una especie de cepillo que barre las paredes del intestino, limpiándolo y permitiendo la expulsión de tóxicos".
Como ya sabes, reducir el nivel de residuos es básico para ganar la partida a la celulitis y también para parar los pies a esa inflamación que no se ve, pero que está en la raíz de tantos problemas de salud y de belleza.
Ficha estos consejos contra la celulitis
1. Bebe 2 litros de agua al día
E infusiones depurativas de alcachofera, abedul o diente de león. La deshidratación hace que la piel pierda elasticidad y la celulitis sea más evidente.
2. Dispara el sabor
De pescados y carnes macerándolos en zumo de lima, vinagre, hierbas aromáticas y ajo.
3. Aceite de oliva virgen
Utilízalo para cocinar y aliñar.
4. Evita el azúcar
Al dañar las fibras de colágeno, empeora la celulitis.
5. Limita la sal
Olvídate de las conservas, los platos preparados (incluso cremas de verduras y salsas), los embutidos y los ahumados.
6. Come hortalizas crudas
En cada comida principal añade hortalizas a ser posible de sabor amargo: endibias, escarola, nabo, etc.
Básicos en tu lista de la compra
1. Pescado azul
Los Omega 3 del pescado azul, el lino, las semillas chía o las nueces son cruciales para el control de cualquier proceso inflamatorio, celulitis incluida.
2. Setas
Son ligeras, ricas en fibra saciante y una de las mejores fuentes de vitaminas D y B. Sin el primer nutriente vivimos inflamados; sin el segundo, la piel pierde firmeza.
3. Cúrcuma
Da prioridad a las especias de mayor poder antiinflamatorio, como la cúrcuma (combínala siempre que puedas con pimienta), el jengibre, el comino, el orégano, el tomillo y el romero.
4. Fresas
Los frutos rojos, pobres en azúcar y ricos en ácido elágico y antocianinas, reducen la celulitis y mejoran la apariencia de la piel. Y come piña, cítricos y kiwi, ya que eliminan toxinas y preservan la fibras tensoras de la piel.
Gazpacho + plato único
Además de ensaladas, puedes preparar gazpachos y cremas vegetales de puerro, calabacín, etc. Son una inyección de nutrientes (vitamina C, E, hierro, etc.) capaces de aumentar la elasticidad de la dermis y mejorar la textura de la piel de naranja.
Es necesario que tomes estos entrantes a cucharadas (¡no a sorbos!) y que los elabores sin pan, en el primer caso, y sin lácteos ni patata, en el segundo. A continuación, elige uno de estos deliciosos platos únicos.
1. Tortilla de calabacín y cebolleta
Con bacalao desmigado, acompañado de tomate y espinacas y 1 rebanada de pan integral.
2. Solomillo de cerdo
Con calabaza al horno condimentada con cúrcuma y pimienta, acompañado de canónigos aliñados con vinagreta de cítricos.
3. Conejo encebollado al vinagre de sidra
Con 3-4 cucharadas de arroz salvaje y espinacas salteadas con unos pocos piñones.
4. Pollo al curri con caldo vegetal
Brócoli y pimiento, acompañado de 3-4 cucharadas de quinoa, rúcula y trozos de almendras o nueces.
5. Muslo de pollo a la plancha con orégano
Verduras escalivadas (berenjena y pimiento) y puré de col blanca y morada.
6. Calabacín relleno
De champiñones y tomates secos con tiras de pavo aderezados con tomillo, acompañado de 3-4 cucharadas de mijo cocido.
7. Medallón de ternera con pimienta
Sobre un lecho de puré de pimiento y tomate asado, con 1/2 patata gratinada con yogur y ajo molido, puerro, mazorquitas y zanahorias al vapor.
8. Sepia a la plancha con ajo y perejil
Acompañada de 3-4 cucharadas de lentejas cocidas con remolacha, bulbo de hinojo y nabo crudos.
9. Lecho de lechuga con salpicón de alubias
Con pimiento y cebolla y marisco: mejillones, gambas, etc.
10. Brocheta de pavo
Con cebolla, pimiento verde y rojo y 2 dados de piña a la plancha,
acompañada de una patata pequeña al vapor y salsa de yogur con ajo, alcaparras y menta.
11. Salteado de setas variadas al ajillo
Con dos huevos poché, una cucharada de guacamole casero y una minitosta de pan de centeno.
12. Mini hamburguesas de salmón
Con endibias troceadas, aguacate y cebolla y una rebanada de pan integral.
13. Salteado de espárragos, tomatitos, setas y habas de soja
Cocidas con macarrones integrales y lomos de caballa escabechada.
14. Rape al horno con pimentón picante
Acompañado de guisantes (frescos o congelados) y zanahorias al vapor.
¿Y de postre? Una pieza de fruta de temporada pequeña y en su justo punto de maduración.
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