Torrijas con miel, helado de vainilla y fresones
Descubre la perfecta unión de sabores con esta receta de torrijas con miel, acompañadas de suave helado de vainilla y frescos fresones, una delicia primaveral que sorprenderá a tu paladar
Explora la deliciosa y novedosa receta de torrijas con miel, helado de vainilla y fresones. Esta combinación única no solo es un placer para el paladar, sino que también aporta los beneficios antioxidantes de los fresones y la energía del pan, ideal para disfrutar en cualquier momento del día.
Su preparación es sorprendentemente sencilla y rápida, lo que la hace perfecta para quienes buscan un postre impresionante sin complicaciones.
La mezcla de la dulzura de la miel, la cremosidad del helado de vainilla y la frescura de los fresones crea una experiencia gastronómica inigualable, convirtiéndola en una opción irresistible para todos los amantes de los postres.
- Ingredientes
- • 4 rebanadas de pan de molde
- • 50 ml de leche
- • 2 huevos
- • 250 g de fresones
- • 1 cucharada de licor de naranja (opcional)
- • 2 cucharadas de mantequilla
- • 4 cucharadas de azúcar
- • 4 cucharadas de miel
- • 250 helado de vainilla
- • la ralladura de una naranja
Tiempo Total15 minutos
Preparación10 minutos
Cocción5 minutos
Coste € € €
Dificultad
Postre Tipo de plato
Primavera Temporada
4 Porciones
350 kcal/ración Info nutricional
Pasos
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01.
Bate los huevos, la leche y el licor y sumerge las rebanadas de pan. Retíralas y escurre el exceso. Espolvoréalas con la mitad del azúcar.
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02.
Derrite un poco de mantequilla en una sartén y dora las rebanadas de pan 2 minutos por cada lado.
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03.
Lava los fresones y córtalos por la mitad dejando los rabitos. Derrite un poco de mantequilla en otra sartén, agrega los fresones, espolvoréalos con el azúcar restante y saltéalos durante 1 minuto.
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04.
Reparte las rebanadas de pan en los platos, pon una bolita de helado en el centro y coloca las fresas alrededor. Rocía con un poco de miel y espolvorea la ralladura de naranja por encima.
El truco de Pronto
Esta receta sugiere un interesante truco: en lugar de usar helado de vainilla, puedes optar por el requesón, formando bolitas con dos cucharas para imitar la presentación del helado.
Este cambio no solo aporta una textura cremosa y un sabor ligeramente ácido que complementa la dulzura de las torrijas y la miel, sino que también puede ser una alternativa más saludable, reduciendo el contenido de grasa y azúcar del postre.
Además, el requesón aporta un toque de frescura y ligereza, convirtiendo este plato en una opción más equilibrada sin sacrificar su delicioso sabor.
Esta alternativa es ideal para quienes buscan opciones más ligeras o para aquellos que desean experimentar con diferentes texturas y sabores en sus postres.