Celia Sánchez-Ramos, inventora del siglo XXI
La ONU la reconoció por dar con un filtro que reduce el efecto de la luz dañina en los ojos y posee varias medallas de oro por sus patentes, destinadas a cuidar la salud ocular
Esta mujer ha tenido siempre muy buena vista para los inventos. Tiene en su haber 22 familias de patentes que están relacionadas, en su mayoría, con algo tan sensible e importante en tiempos de teléfonos inteligentes, tabletas y ordenadores, como la protección de la retina. Y es que, como dice Celia Sánchez-Ramos, licenciada en Farmacia, diplomada en Óptica y doctora en Medicina Preventiva y Salud Pública, sufrimos un exceso de luz y, por ello, recomienda "reducir el tiempo de exposición a las pantallas y dar más descanso a los ojos".
"La luz azulada puede dañar la retina"
Habla con conocimiento de causa porque lleva más de dos décadas de investigaciones, cuyas conclusiones deberían hacernos reflexionar. "En los estudios que hemos llevado a cabo desde el 2001, vimos que la luz azulada es perjudicial y puede dañar la retina, causando una pérdida de hasta el 89 por ciento de sus células neuronales", afirma.
Por ello trabajó a conciencia hasta inventar, primero, unas lentes de contacto con un filtro natural para evitar los efectos de parte de esta luz nociva y, años más tarde, cuando empezaron a usarse los leds, creó otros protectores de pantalla y para dispositivos, con el objetivo de evitar riesgos en la córnea, el cristalino y la mácula.
"Hemos observado que si usamos un filtro amarillento, disminuye el problema una barbaridad y mejora un 90 por ciento. Las luces cálidas son menos nocivas", asegura Carmen, que, en el 2009, fue reconocida por la ONU como mejor inventora internacional y, dos años después, llegó a ser candidata a los entonces llamados premios Príncipe de Asturias.