El pasado mes de octubre, con el estreno de 'TardeAR', se desató una suerte de "lucha de titanes" entre dos de las presentadoras más aclamadas de nuestro país: Ana Rosa Quintana y Sonsoles Ónega compartían, por primera vez, franja horaria. Eso sí, lo hacían como competencia..., El programa de Quintana llegó para intentar hacerle sombra a 'Y ahora, Sonsoles', pero desde el principio lo tuvo muy complicado: Sonsoles supo aprovechar en su día el hueco que dejó 'Sálvame', y se llevó a varios miles de espectadores de Mediaset a Atresmedia., El liderazgo televisivo de la hija de Fernando Ónega se ha mantenido inamovible durante meses, debido también a una decisión sin precedentes: su programa no tiene cortes publicitarios (los bloques de anuncios están al principio y al final), lo que hace que la gente no cambie de canal.