Croquetas de setas
Aprende a cocinar esta delicia de croquetas y aporta un nuevo sabor a tus menús con la incorporación de las setas. ¡No te vas a arrepentir!
Ya sean de jamón, queso o pollo las croquetas son siempre un éxito. Si quieres preparar una receta que encandile a tus comensales, sin duda, tienes que probar esta receta de croquetas de setas.
Su suave y delicioso sabor te hará repetir este plato una y mil veces. ¡Son una exquisitez! En poco más de una hora tendrás listas unas riquísimas croquetas que podrás preparar siguiendo el siguiente paso a paso tan sencillo. ¡Atrévete con ellas!
- Ingredientes
- • 250 g de setas
- • 60 g de harina + 4 cucharadas para rebozar
- • 60 g de mantequilla
- • 1/2 l de leche
- • 2 huevos
- • pan rallado
- • aceite
- • sal
- • pimienta
Tiempo Total1 hora 15 minutos
Preparación30 minutos
Cocción45 minutos
Coste € € €
Dificultad
Segundo plato Tipo de plato
Todas Temporada
4 Porciones
La receta paso a paso de croquetas de setas
Pasos
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01.
Corta el pie arenoso a las setas y, si es necesario, límpialas con un paño húmedo. Córtalas en cuadraditos y ponlas en una sartén con aceite caliente. Rehógalas a fuego medio durante 8-10 minutos, removiendo de vez en cuando. Salpimiéntalas.
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02.
Mientras, pon la mantequilla y un par de cucharadas de aceite en una cacerola, calienta y, cuando la mantequilla esté fundida, incorpora la harina. Remueve con una cuchara de madera para deshacer los grumos.
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03.
Sin dejar de remover, añade poco a poco la leche tibia, sala ligeramente y deja cocer durante 20 minutos, removiendo a menudo, hasta que espese. Añade las setas con todo su aceite, cocina un par de minutos más, siempre removiendo, y deja enfriar en la nevera.
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04.
Da forma a las croquetas, enharínalas, pásalas después por huevo batido y rebózalas con pan rallado. Fríelas en aceite bien caliente y sírvelas acompañadas con un poco de ensalada.
El truco de cocina de Pronto
Si no tienes mucho presupuesto para gastarte en esta receta, puedes hacerte con una remesa de setas deshidratadas o congeladas, en lugar de las frescas. Y es que descongelándonas en la nevera un día anterior a su cocinado, podremos disfrutar de su intenso sabor.