Mario Moreno, 'Cantinflas', todo sobre el cómico mexicano más importante
Con la cincuentena de películas que protagonizó hizo reír a varias generaciones de latinoamericanos y españoles

Mario Fortino Alfonso Moreno Reyes, más conocido como 'Cantinflas', fue un auténtico pionero del cine mexicano.
Mario Fortino Alfonso Moreno Reyes, universalmente conocido como 'Cantinflas', nació el 12 de agosto de 1911 en Ciudad de México, capital de este país. Fue el sexto de los 14 hijos (sólo sobrevivieron ocho) de Pedro Moreno, un modesto trabajador de Correos, y María Soledad Reyes.
Inteligente, divertido y muy espabilado, sólo pudo ir al colegio algunos años porque tuvo que ponerse a trabajar para contribuir a la precaria economía familiar. Ganó sus primeros pesos como recogedor de pelotas en un club de tenis y, luego, trabajando de limpiabotas.
De carácter fuerte y con dotes de mando, era el líder de su pandilla de amigos, a los que solía divertir con sus imitaciones y chistes. Desde niño le apasionaba la interpretación, pero su padre no veía con buenos ojos una actividad que, en esos tiempos, era sinónimo de penurias y pobreza. Gracias su padre, trabajó un tiempo como cartero, pero sin renunciar a sus aficiones artísticas.
Con 14 años se fue a Jalapa para trabajar en el comercio de un pariente lejano, pero apenas duró un mes. De allí, se fue a Chihuahua donde montó una comedia titulada 'Las travesuras de Marte', que representó ante una guarnición militar.
Químico, boxeador, torero y comediante
Se ganaba la vida con profesiones tan diversas como químico, boxeador e incluso torero, hasta que se unió a un circo ambulante donde fue acomodador y taquillero. Un día, por enfermedad del cómico titular, salió a escena. Empezó a contar los chistes del repertorio, pero nadie se reía y decidió improvisar. Su atropellada verborrea, hilvanando frases sin sentido, hizo gracia a la gente, que no paró de reír y, al acabar, lo despidió con un gran aplauso.
Al día siguiente, cuando el otro actor volvió, la gente empezó a pedir a gritos: 'El de ayer, el de ayer'. Así fue como Mario Moreno inventó un lenguaje tan particular, que se convertiría en su seña de identidad artística y en la clave de su éxito: hablaba mucho, a toda velocidad, sin decir nada, con términos cultos mal aplicados y muletillas de lenguaje coloquial.
Al principio, había intentado imitar al cómico estadounidense Al Jolson y se pintó la cara de negro como él, pero después forjó su propio personaje: "Un simpático y entrañable pícaro, vestido con pantalones holgados, una cuerda a modo de cinturón, camiseta rota, pañuelo al cuello y un peculiarísimo bigote. Su propuesta funcionó y aquel personaje, ligeramente parecido a Charlot, encandiló al público.
Sobre la creación de su sobrenombre, daba varias versiones. A veces, decía que lo había inventado él por la sonoridad, pero otras reconocía que, en una actuación, alguien del público le gritó: 'Cállate, cantinflas', y él adoptó artísticamente un término que ya está en el diccionario español con la acepción de alguien que habla de forma disparatada.
Valentina Ivanova, el gran amor de su vida

Cantinflas, el día de su boda con Valentina Ivanova.
Cantinflas empezó a llenar los locales donde se presentaba con espectáculos de humor con trasfondo de crítica social. En 1930, era un cómico conocido y actuaba en el circuito de las carpas de Ciudad de México.
En una, la Carpa Valentina, conoció a Valentina Ivanova Zubareff, la que sería el gran amor de su vida y su única esposa. Nacida en Rusia, ella y su familia habían emigrado a México, donde montaron una compañía ambulante.
Valentina hacía un número de baile con sus hermanas, Olga y Tamara, y sus padres contrataron a 'Cantiflas' para completar el show con su actuación cómica. Tras un tiempo trabajando juntos, Mario y Valentina se enamoraron y formalizaron un noviazgo que les llevaría a casarse el 15 de diciembre de 1934.
Un hombre muy solidario que montó una oficina para gente necesitada

'Ahí está el detalle' fue el arranque de su brillante carrera como actor de cine.
Establecidos en la capital, Mario tenía cada vez más público, porque a los salones donde actuaba acudían estudiantes, intelectuales y políticos. Para entonces, ganaba la cantidad de 35 pesos diarios, un buen salario para la época. Pero su éxito se iba a hacer mucho mayor y le permitiría llegar hasta otro tipo de público. Además, las excelentes críticas que recibía hicieron que su nombre empezara a ser conocido en el extranjero.
Ese mismo año, el realizador mexicano Miguel Contreras le dio la oportunidad de debutar en el cine con 'No te engañes, corazón', a la que siguieron 'Así es mi tierra', 'Águila o sol' y una serie de cortometrajes.
No obstante, no se consagró como ídolo hasta 1940 con 'Ahí está el detalle', título que se convertiría en una de sus muletillas más populares. Esa película le permitió fundar Posa Film, productora con la que rodaría los casi 50 títulos de su carrera, entre los que destacan 'Por mis pistolas', 'Romeo y Julieta', 'El supersabio', 'El analfabeto', 'El profe' o la producción estadounidense 'La vuelta al mundo en 80 días".

Cantinflas, en una escena de 'El padrecito'.
El éxito de esta propició que en 1960 rodara 'Pepe', de George Sidney. Pero fracasó y Cantinflas no volvió a trabajar fuera de las fronteras de su país, salvo en la española 'Don Quijote cabalga de nuevo', de Manuel Delgado, director con el que había hecho 'El padrecito', primer filme del mexicano en color.
Para entonces, Cantinflas era una estrella solidaria. Si en sus interpretaciones denunciaba las desigualdades sociales y la insolidaridad, en la vida real realizaba obras caritativas y llegó a montar una oficina para gente necesitada.
Un hijo adoptado y dos extraños suicidios

Lina Morgan y Cantinflas, en una de las visitas del artista a España.
En 1960, ante la imposibilidad de tener hijos biológicos con su mujer, adoptaron a un niño al que llamaron Mario Arturo. Pero, según algunas fuentes, era en realidad hijo biológico del actor y había nacido de su relación con la estadounidense Marion Roberts, a quien le habría "comprado" el bebé y que se suicidó poco después de haber entregado a su hijo.
No fue el único suicidio que se vinculó a la figura de Cantinflas. Algunos relacionaron también con Cantinflas el suicidio de Miroslava Stern, que se quitó la vida el 9 de marzo de 1955, a los 29 años. Actriz de origen checo y afincada en México, se decía que había iniciado un romance con Cantinflas en 1947, cuando coincidieron en la película '¡A volar joven!', y que se habría quitado la vida por la negativa del actor a divorciarse de su mujer.
La felicidad de ser padre duró poco porque Valentina falleció, en 1966, de un cáncer de huesos. Aquella pérdida le cambió el carácter y se volvió un hombre taciturno, serio y triste, que no supo cuidar de su hijo. Años después de enviudar, tuvo un romance con la actriz española Irán Eory, pero la relación duró poco.

El actor, con la española Irán Eory.
Mascota del Mundial de fútbol de México

Óscar Jaenada dio vida a 'Cantinflas' en el cine.
Tras rodar en 1982 su última película, 'El barrendero', y haber sufrido un ataque al corazón, 'Cantinflas' se recluyó en su lujosa mansión en una zona residencial del DF.
Eso no afectó a su popularidad y en 1986 su figura fue elegida como mascota del Mundial de fútbol de México. Un año después sufrió un aneurisma cerebral que le apartó del todo de la vida social, y, en sus últimos años, se vio envuelto en un escándalo.
Una empleada suya en EEUU, la texana Joyce Jett, consiguió que la ley estadounidense la considerase como pareja de hecho del actor. Aunque Cantinflas siempre negó la relación, tuvo que darle una parte de su fortuna.
El 20 de abril de 1993, Cantinflas falleció de un cáncer de pulmón. Por su capilla ardiente, en un teatro de la capital mexicana, pasaron medio millón de personas y en el epitafio de su tumba hizo escribir: "Parece que se ha ido, pero no es cierto".
Considerado uno de los hombres más ricos de México, su hijo fue su heredero, pero Mario Moreno Ivanova dilapidó aquella increíble fortuna pleiteando con su familia paterna por los derechos de autor de una treintena de películas de Cantinflas.

Los nietos del actor mexicano Mario Moreno "Cantinflas": Valentina Moreno del Moral, Mario Moreno del Moral y Marisa Moreno Bernart.
Tras una vida agitada, Moreno Ivanova murió en el 2017, con 57 años, de un infarto, cuatro años después de que uno de sus cinco hijos, Mario Moreno Bernat, se hubiera suicidado.
En el 2013, el español Óscar Jaenada protagonizó un 'biopic' sobre el célebre cómico mexicano.