Kike Osborne: así ha cambiado el hijo de Bertín y Fabiola desde que va al colegio
El primogénito de la venezolana, que ha sido escolarizado por primera vez recientemente, se ha convertido en un adolescente rebelde que intenta hacer valer su carácter
La venezolana debe armarse de paciencia para intentar que Kike la obedezca.
El tiempo vuela y, aunque a muchos les costará creerlo, Kike, el primogénito de Bertín Osborne y Fabiola Martínez, cumplirá 17 años el próximo 31 de enero y lo hará con cambios en el carácter propios de su edad, como ha revelado su progenitora.
"Está en un momento tan adolescente que no se quiere duchar. Antes era más dócil. Ahora, no, es rebelde. Está reivindicándose. Estoy feliz", manifestaba recientemente Fabiola a Pilar Vidal en el podcast ‘Drama Queen’, mostrándose contenta por constatar esta evolución en su hijo, que tiene parálisis cerebral.
"¡Le está cambiando la voz!"
Madre e hijo han tenido desde siempre una relación y una complicidad muy especial hasta el punto de que parecen entenderse solamente con mirarse.
A los cambios propios de la edad, se han sumado otros para Kike, que este curso fue escolarizado por primera vez. "Antes no lo estaba, hacíamos mucha terapia con él en centros, pero no era oficialmente un colegio", señalaba Fabiola Martínez, quien se mostró convencida de que el centro al que acude actualmente será beneficioso para el chico.
"Le están enseñando otro tipo de comunicación. Honestamente, es que me empeñé tanto en que fuese verbal que nunca le enseñé otra manera y hay muchísimas formas, como, por ejemplo, los pictogramas, es decir que él toque mi foto en una pantalla para llamarme", explicó la venezolana.
Kike y Fabiola
Cada día más mayor, según confesó su madre, Kike también está experimentado cambios físicos propios de la adolescencia. "¡Le está cambiando la voz!", explicó la ex de Bertín imitando a su hijo diciendo "mamá" y poniendo una ronca voz masculina. Además añadió que su tono se vuelve más duro si ella no acude enseguida. "Va a tener un carácter, bueno, tiene a quien salir, por los dos lados", comentó, divertida.
La fundación, el "regalo" de la mayoría de edad
Kike y Fabiola en un acto de la fundación.
Hace apenas dos semanas, la venezolana avanzaba en una entrevista con tu Revista Pronto que la Fundación Bertín Osborne pasará a llevar el nombre de Kike, algo que sus padres acordaron en el patronato y que esperan que pueda ser efectivo cuando su primogénito cumpla 18 años, es decir, en el 2025. "Lo esencial es que sea Kike quien le dé la visibilidad", destacó su orgullosa madre.
La existencia de la fundación ha sido un bálsamo para Fabiola. "Ayudar reconforta, para mí ha sido una terapia. En mis momentos más difíciles de querer tirar la toalla, como cuando nos dieron dos años de esperanza de vida para Kike... a mí me reconfortaba ir a un taller con las familias y saber que les estábamos ayudando", aseguró recordando uno de los momentos más dolorosos de su vida.
Fabiola y Bertín toman conjuntamente las decisiones importantes que atañen a sus hijos.
El prematuro nacimiento de su primogénito y los problemas de salud que le acompañaron fueron una dura prueba para la venezolana y su entonces marido, Bertín Osborne. Desde el primer momento, ambos demostraron ser poseedores de una gran fortaleza y se volcaron en la búsqueda de terapias y profesionales que pudieran ayudar a su pequeño, quien fue superando obstáculo tras obstáculo.
Aunque los progresos de Kike la animan a seguir adelante con su lucha, Fabiola Martínez no ha escondido que la labor de estar pendiente de él las 24 horas del día es dura. "Ningún cuidador está preparado si no es profesional, vamos aprendiendo con ellos. Mi reto es casi diario", aseguró a tu Revista Pronto a finales de noviembre. En la misma entrevista, explicó que su hijo mayor sufre crisis epilépticas por la noche, algo que afecta también al descanso de la venezolana ya que duerme con él. "Hay días malos, obviamente, pero vas entrenando tu actitud", destacó la ex de Bertín.
Dos hijos increíbles
Bertín Osborne en la cama con sus hijos, Kike y Carlos.
Testigo de los esfuerzos de su madre para con Kike es Carlos, el hijo menor de Fabiola, que nació en noviembre del 2008. La venezolana confesó recientemente que se dio cuenta de que seguía tratando a éste como a un niño cuando ya había demostrado una gran madurez. La exmodelo aseguró que se esforzó para cambiar su actitud con él y se deshizo en elogios hacia su hijo menor. "Carlos tiene una sensibilidad muy especial, empatiza mucho con los demás, también es que tiene el hermano que tiene", destacó.
Aunque, como madre, tiene que lidiar con dos adolescentes y lo que ello conlleva, Fabiola Martínez afronta esta etapa con energía, buen humor y mucho positivismo, algo que la caracteriza desde hace tiempo. "Tengo la convicción de que voy a hacer muchas cosas en el 2024, profesionales y personales", ha afirmado.